Ayer cuando estaba en la linea de la biblioteca, vi a un padre joven golpear con látigo la espalda de una niña. Cuando la niña lloraba se le ordenaba dejar de llorar y cuando el llanto no se detenia el padre volvia a golpearla, usualmente en estas ocasiones yo miro y me siento culpable más tarde, pero esta vez yo hablé y dije educadamente: "Pegar no funciona", hay mejores maneras de enseñar a los niños cómo comportarse. El niño dejó de llorar y me miró con los ojos muy abiertos, la madre deslumbrada me gritó, que me meta en mis asuntos, entonces, levanto al niño y se apresuro.

Hace cincuenta años, estaba casi universalmente aprobado, que los padres tenían el derecho de pegar a sus hijos. Mi testarudo abuelo creyó que pegar era necesario para el desarrollo moral e intelectual del niño, mi padre a menudo deseaba saber que si me deberia haber pegado, pero nunca lo hizo. Y yo nunca golpearé a mi hijo.

Hoy en el antiguo evangelio de usar la fuerza para controlar a los niños, está perdiendo discípulos facilmente, aunque los golpeadores testarudos permanecen sin convencerse de como nosotros percibimos el bienestar de nuestros niños y se ha movido abrumadoramente hacia una perspectiva menos violenta y más humana. Pero si nuestra conciencia cambia, nuestras leyes se están quedando atrás. Ahora en América no hay ninguna ley que prevenga el 26% nuestra población, de las 70 millones de personas que son corporalmente castigados por sus padres bajo la edad de 18 años, en este aspecto, otras naciones están mucho mas avanzadas. Hace 20 años Suecia llego a ser el primero en pasar por una ley, prohibiendo el castigo corporal de los niños. ¿Que paso despues? los padres encontraron maneras más sutiles y más inteligentes para trabajar con sus niños. Austria, Croacia, Chipre, Dinamarca, Finlandia, Italia, Letonia, Noruega, y el Reino Unido siguieron el ejemplo de Suecia. Ironicamente estan mas protejidos nuestras escuelas que nuestros hogares, el castigo físico esta declarado prohibido en las escuelas de 27 estados, eso puede reflejar el trabajo de un número de organizaciones dedicadas a la proteccion del niño y a la eliminación de la violencia física en contra de ellos.

Dos de estos centros más activos son: - The National Center for the Study of Corporal Punishment and Alternatives, dirijido por IrwinHyman - Parents and Teachers Against Violence in Education, dirijido por Jordan Riak

Riak seguramente va hacer titulares en el periódico a nivel nacional el 26 de Enero, cuando el planea proponer al Consejo Municipal de la ciudad de Oakland Calif, para que esta ciudad se convierta la primera de la Nación en "Zona que no se golpea a los niños". Esta propuesta no condenaría los golpes por simples palmadas. Para cosolidar en Oakland una campaña educativa apuntada a la eliminacion de los golpes en los lugares públicos, como tú puedes esperar si muchos padres estan luchando por mantener su libertad de golpear y sus derechos de hacer daño a sus hijos en la forma que ellos vean conveniente. Pero sus argumentos se estan debilitando en frente a los testimonios de médicos, psiquiatras e investigadores académicos.

La evidencia indica que golpear a los niños es más que éticamente errónea, esto los lastima por muchos años y de maneras muy complejas. Castigos físicos perjudican, y dañan a los niños física y emocionalmente. Golpeando a los niños aumenta su hostilidad y enseña violencia en la niñez, incrementando los golpes no decrece la conducta antisocial.

Murray Straus, en su libro Beating the Devil Out of Them, es un escrito que se menciona que si frenamos el castigo fíisico en los niños, se cosechará muchos beneficios. Ellos van a tener menos oportunidades de envolverse en el abuso del alcohol la violencia adulta o sexo masoquista, tendrán un nivel bajo para la depresión, una gran probablidad de completar una educación más avanzada y una mejor oportunidad de que sus ingresos económicos sean mayores.

Algun día en esta joven nación, los niños no van a ser vistos como posesiones para ser manipulados por los caprichos de sus padres, pero sí como individuos únicos que merecen el mayor respeto. Hasta entonces, aquellos quienes estan al cuidado de los niños tienen que trabajar para hacer leyes para proteger los componentes de la vida del niño y los derechos naturales que tiene cada uno de ellos.

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Michale Pastore es el autor de numerosos libros respecto a como trabajar sin violencia con los niños.

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